Definición y beneficios del Consejo Climático
¿Qué es un consejo climático?
- Todos los miembros de la RICC son consejos climáticos designados oficialmente por los gobiernos nacionales como organismos asesores en materia de política climática. Esta designación puede adoptar diferentes formas; por ejemplo, a través de la legislación, de un decreto ministerial o de un acuerdo de subvención comercial.
- Por lo general, los consejos (también llamados «comités» o «comisiones») se componen de expertos independientes, procedentes de diversos ámbitos académicos relacionados con la política climática. También pueden incorporar a expertos que representen intereses más generales del gobierno, las empresas y la sociedad civil.
- Los consejos suelen contar con el apoyo de una secretaría, que generalmente recibe financiación de un ministerio patrocinador, aunque también puede recibirla de otros donantes. Las secretarías ofrecen una mezcla de conocimientos analíticos, administrativos y de comunicación.
- El objetivo principal de nuestros miembros es asesorar a sus gobiernos sobre las políticas en materia de cambio climático (mitigación, adaptación o ambas) y sobre la transición justa asociada a la política climática (en lugar de tener competencias más amplias en todos los aspectos de la política social, económica y medioambiental).
- Actualmente, la RICC se dedica principalmente a apoyar a los consejos climáticos nacionales. Sin embargo, el Comité Directivo tomará en consideración otros tipos de consejos climáticos (por ejemplo, a nivel subnacional o caso por caso) si recibe una solicitud directa por su parte.
Policy Brief
2024-2025
Download a copy of our policy brief packed full with case studies: “What is a climate council, why countries should establish one, and how the ICCN can help”
¿Por qué deben los países establecer un consejo climático?
El mundo se enfrenta al urgente reto de limitar el calentamiento global a 1,5 °C, y es fundamental que la gobernanza climática nacional adopte un enfoque científico. Desde el principio, los consejos climáticos nacionales (que reúnen a expertos del ámbito científico, político y económico) han desempeñado un papel central en las estrategias de descarbonización.
A continuación, explicamos las seis razones por las que todos los países deberían plantearse crear un consejo climático, independientemente de su nivel de recursos.
- Sus recomendaciones ayudan a los gobiernos a tomar las mejores decisiones políticas a largo plazo para cumplir con sus compromisos de CDN y otros objetivos legalmente vinculantes.
- Su posicionamiento en la gobernanza climática nacional garantiza su capacidad de influir y generar confianza.
- Sus conocimientos aportan credibilidad a las decisiones y ayudan a alcanzar más rápidamente un consenso sobre las estrategias a seguir.
- Proporcionan certidumbre a los inversores respecto a la economía baja en carbono de un país, ya que los consejos se crean para ser políticamente imparciales y para durar más allá de los 4 o 5 años que suelen durar los ciclos de los gobiernos.
- Demuestran liderazgo en la gobernanza climática y pueden influir a otros para que sigan su ejemplo.
- Las investigaciones demuestran el impacto de los consejos climáticos a la hora de elaborar políticas climáticas eficaces y establecer presupuestos de carbono.